27 octubre, 2009

Te conocí - Parte II

Esa semana terminó con un par de desilusiones más, dos noches en las que quería volver a saber de ella, pero nunca llegó...

Fue extraño porque mi cabeza no estaba ni cerca de la ciudad donde me encontraba, estaba con ella, queriendo saber más, queriendo conocerla, leer un poco más acerca de ella, preguntándome por qué no le pedí ni el número del celular... Ilusiones que no eran una realidad, pero posibilidades que deseaba con todo mi corazón sucedieran...

Ese domingo en la noche, hablaba con mis amigos, la joda del messenger, algunos trabajos de la universidad de último minuto, canciones que iban y venían cuando de repente esa ventana que se despliega abajo anunciando la llegada de alguien indicó que Clara había iniciado sesión... Mi corazón empezó a latir demasiado rápido, me puse muy nervioso y me puse a pensar cuál sería el momento indicado para hablarle (Sobre todo para no mostrarle el hambre, porque como dicen en mi país "el que muestra el hambre no come"). Esperé algunos minutos, y no pasados los 5 siguientes me decidí a hablarle, escribí ese  "hola" y el corazón saltaba, se quería salir de mi pecho esperando a que respondiera y así lo hizo "hola, ¿cómo estás?" (típico en ella)... Y es en este momento en el que debo confesar algo, yo soy muy malo para caerle a las mujeres, y es aún peor cuando me parecen tan interesantes como ella me parecía. Así que, mi querido lector, no logran imaginar cual podría ser el tipo de conversación que propuse y creo que por eso fue que no tardó mucho en volver a salir del Messenger. Claro ella también estudiaba y seguramente estaba preparando algún examen. Mmm... Yo también debía hacerlo pues era final del semestre, tenía trabajos pendientes por hacer y parciales finales que abundaban por preparar para no perder el semestre... No, yo estaba pensando en ella, esa mujer que noches atrás me había trasnochado, pero que esta noche había sido tan distinto, tan frustrante que me entristeció, pues mis ilusiones eran otras; claro yo me dije: " bueno, debió haber sido cuestión de la noche anterior y la vida continuará como si nada"...

¿Cómo si nada? Pues no, no se salía de mis pensamientos, cada instante y cada palabra que me había podido acercar a ella esas dos noches que habíamos hablado la tenía en mi mente, recordaba cada palabra, cada gusto, cada respuesta que me había dado y no entendía como podía haber cambiado todo del cielo a la tierra... Un día más pasó en la universidad y en la noche, con menos ansiedad volvió a relucir esa ventanita que aparece abajo a la derecha con su entrada "Clara ha iniciado sesión"... se repite la faena de saludos y es allí cuando noto que volvió a ser la Clara conversadora de una semana atrás... Te seguí conociendo, a fondo...

- - Continuará - -

6 comentarios:

  1. hola como estas? (tipico de ella)......bueno y no mostraste el hambre, lograste comer al fin? No entiendo como logras recordar esos detalles. Siento que clara esa noche no haya sido la conversadora de siempre, pero ya sabes tiene sus dias (eso aun no cambia), pero te aseguro q piensa en ti.

    ResponderBorrar
  2. Y pensar que he sentido últimamente esa sensación de brinco en el corazón cuando aparece esa ventanita indicando que esa persona está online......
    Claro ni decir cuando llama!!!

    Me gustó. Aunque creo que debes "correr" menos cuando escribes

    ResponderBorrar
  3. que buena memoria tienes, o se nota a leguas que esa persona de verdad te habia inquietado el corazon, solo algunas personas logran dejar recuerdos in-borrables y perdurables.

    sentir esa cercania de alguien que a duras penas conocemos y generar tanta emocion es algo indescriptible..

    ResponderBorrar
  4. Esa sensación, esas maripositas en el estómago son tan maravillosas y tan adictivas. El problema es cuando esa persona no aparece y todas las ideas empiezan a rondar por la cabeza...¿dónde estará? ¿qué estará haciendo? ¿le haré falta?
    Lo he sentido tantas veces, se vuelve adictivo!!!

    ResponderBorrar
  5. La vida no sigue como si nada, cuando el corazón empieza a sentir

    ResponderBorrar
  6. Wow, nada mejor (y a la vez extraño), que tener esas hermosas sensaciones cuando estás conociendo a alguien...no sabes por qué te sientes así, ni porqué no te lo puedes sacar de la cabeza, no haces más que pensar en el otro...es, quizá, uno de las mejores cosas del amor. Al leer esto y recordar las que me han pasado, me sentí completamente identificada.

    ResponderBorrar